Cuando llega el calor, los chicos se enamoran, dice la canción. ¿Y el otoño? Más que de Redoxón, es tiempo de películas de bodas, de comedias románticas que nos hagan pasar un buen rato agazapados bajo las mantas, bien pertrechados de chocolate y, a ser posible, con una buena lluvia que aumente el placer de no salir de casa. (Ahora lo llaman ‘nesting’, de volver al nido, dándole aspecto de tendencia).
En tiempos en que cuesta más, entre tanta atosigante oferta, seleccionar el título que colme nuestras expectativas, es bueno ir con los deberes hechos de antemanos. Y contar con buena lista, como la que viene a continuación, sobre las mejores películas románticas de bodas. ¿Quieres?
La boda de Rosa
Comenzamos con un planteamiento original para una película reciente (dirigida por Iciar Bollaín, se estrenó en 2021 y se llevó varios goyas, como el de Mejor actriz de reparto para Nathalie Poza, con permiso de Candela Peña, que borda el papel).
Y decimos original porque la boda es nada más y nada menos que consigo misma. ¿Casarse con uno mismo? Pues sí. Y con la misma emoción que toda boda implica, pero enfocada a la autoafirmación, a la idea de reconocerse y quererse. Lo que no está exento con la posibilidad de un amor ‘real’, como verán quienes disfruten de esta amable comedia del amor… a uno mismo (necesario para poder amar a los demás).
Historias de Filadelfia
Viajamos ahora al cine clásico, al Hollywood de los años cuarenta, para recomendar esta película considerada por muchos una joya del cine nupcial. Dirigida por ese maestro dle cine llamado George Cukor (famoso sobre todo por su My Fair Lady), Historias de Filadelfia nos muestra una boda peculiar, por ser la segunda de la protagonista (Katharine Hepburn).
Cuando el exmarido se presenta días antes del enlace, la tensión se corte en el aire, en una comedia perfectamente engranada con dosis muy bien medidas de ironía y una gran química entre sus personajes.
Cuatro bodas y un funeral
Un clásico contemporáneo, los más jóvenes, los milenials de última hornada quizá no hayan oído hablar de esta película que podría definir el género de comedia romántica por sí sola. Con un reparto certero en que brillan por luz propia tanto Hugh Grant como Andie McDowell y cuya relación se va forjando a través de las distintas bodas en las que coinciden. Una película que ofreció también el momento estelar de Rowan Atkinson en un cameo memorable y que sin duda merece todos los visionados posibles.
El hijo de la novia
Una película deliciosa que muestra el mejor cine argentino de la época (primeros años dosmil), de Juan José Campanella, que daría otros títulos memorables y exitosos como El secreto de tus ojos.
Actores fetiche como Ricardo Darín darían el do de pecho en una comedia que también supuso el reconocimiento actoral de Eduardo Blanco, con su vis cómica de altura. ¿La trama? El dolor por la venta del restaurante familiar que será mitigado con una boda por la Iglesia algo sui generis, cumpliendo así el deseo de la madre de la novia, aquejada de alzhéimer.
La boda de mi mejor amigo
Otro clásico del cine de amor y boda por todo lo alto que supuso la consagración de hasta entonces un desconocido Rupert Everett, con una Julia Roberts aún pletórica y un momento musical que se coló de rondón en la historia del cine. ¿Quién no ha cantado o tarareado la pegadiza I Say a Little Prayer (For You), que nos trae esa escena inolvidable que convierte a la comedia en un repentino musical sin desperdicio.
Un cine para recordar, para viajar a las bodas de los demás y, por qué no, para pensar ideas para la propia. ¿Estás pensando en casarte? Entonces tenemos que hablar… Porque en Villa Laureana cumplimos tus sueños, ya sean frikis, clásicos, íntimos o apuestos por el lujo y esplendor.
